5 octubre, 2016
, Uruguay

La cosificación de la pobreza también es violencia

«Discriminar también es violencia, que no te gane la indiferencia», fue la consigna de la Marcha por la Diversidad que se realizó en Montevideo el pasado viernes.

 

¿Si apoyamos la consigna de la marcha? Sí.

 

¿Si estuvimos de acuerdo con la proclama? Sí.

 

¿Si estamos de acuerdo de vivirlo como una fiesta? Sí.

 

¿Si nos parece que hay que sostener el trasfondo de protesta? Sí.

 

¿Si conocemos otras formas de discriminación? Sí.

 

¿Si aparte de maltratarnos por trolas, putas, y negros también nos discriminan por villeros? Sí.

 

¿Si de chicos tuvimos que empezar a laburar y dejar los juegos? Sí.

 

¿Si a alguna vez faltamos a la escuela porque nos faltaban los championes? Sí.

 

¿Si nos damos cuenta que por usar gorros nos tratan de ladrones? Sí.

 

¿Si nos hicieron creer que por eso eramos peores? Sí.

 

¿Si alguna vez del hambre nos dolió la panza? Sí.

 

¿Si nos dijeron que no teníamos voz porque eramos pobres? Sí.

 

¿Si ahora que tenemos garganta vamos a gritar para ser escuchados? Sí.

 

Si te acostumbraron a vernos como estadísticas en los diarios, a que sepas que el 21% de los escolares vive en un asentamiento, y que nuestras madres jóvenes llegan al 17%, te gritamos nuestra consigna para terminar el mes de la diversidad, a ver si al fin la leemos en algún titular:

 

La cosificación de la pobreza también es violencia.

 

 

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2 comentarios sobre «La cosificación de la pobreza también es violencia»

  1. Muy recomendable el libro «chavs-la-demonizacion-de-la-clase-obrera» de Owen Jones, a cuento de reinvidicaciones como «La cosificación de la pobreza»
    También la última película de Ken Loach » I´m David Blake», acerca de lo mismo.
    Soy uruguaya vivo hace años en Segovia, acabo de conocer vuestro blog por recomendación de una amiga.
    Bravo y enhorabuena!!

  2. Es admirable su lucha y el grado de analisis y todo hecho a pulmon, con imaginación, con creatividad.
    Los veo siempre en los kioscos de diario.
    Ayer vi el caso de Ivan Navarro y Ezequiel.
    En los noventa leía Cerdos y Peces, voy a comenzar a leer su revista.

    Un fraternal abrazo

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