El jueves pasado fueron presentados, en el Pellicier, los talleres de apoyo escolar, teatro y arte, comunicación popular y el espacio de mujeres de la mano de un gran Festi Locro en plena calle.
Letras: Agustina Rios *Integrante del Taller de Comunicación Popular*
Fotos: Sol Arrieta *Integrante del Taller de Comunicación Popular*
Banderines, carteles y sonrisas desde bien temprano se hicieron presentes en el Barrio Pellicier el pasado jueves para dar comienzo al denominado «Festi Locro poderoso». Un evento autogestivo que tuvo como objetivo el lanzamiento de los talleres que realiza esta asamblea.
A partir de las 11.00am se fueron acercando los chicos del barrio, para jugar con los pibes de La Nebulosa. En una ronda y tomados de una bandera circular, llenaron la calle de risas. Las pancitas empezaron a sonar y el chocolate caliente no tardó en llegar. Las compañeras de la cocina sirvieron más de 50 vasos de leche para todos los que se acercaban y se deleitaban con este desayuno.
Era pleno mediodía, y los stands de los talleres se estaban formando, mientras el esperado locro se iba cocinando. Los artistas cuyanos llegaron con un mate en la mano y los bombos de las murgas se escuchaban por todos lados. El escenario llegó y la fiesta comenzó con música argentina para ponerle el toque patriótico a la jornada.
Los pequeños artistas del taller de arte pintaron en un gran pizarrón y le mostraron a todos los y las presentes las herramientas que están aprendiendo. Mientras tanto, los pibes del taller de comunicación popular entrevistaron y presentaron a los artistas que nos acompañaron. Las chicas del espacio de mujeres hicieron carteles visibilizando el machismo fuertemente arraigado en nuestra sociedad.
En el escenario, el grito poderoso fue sumando fervor de la mano de «Bru Ne» y «La Eneida» que, con sus dulces voces, reclamaron por más cultura popular. Nahuel Jofré nos hizo bailar con sus canciones de folcklore, mientras comíamos las sopaipillas que nos prepararon las compañeras de la cocina.
Las murgas y su alegria no podían faltar. «Los Imparables» del barrio Junín y luego «Los Piantados por el Pulso», locales del vecindario, le pusieron calor a la fría tarde que moría.
Entre ellos el candombe que lleva nuestro mismo nombre hizo mover las caderas al ritmo uruguayo: «La Poderosa» de percusiones de madera.
Y para el cierre, cuando el sol cuyano le daba paso a la luna, La Paloma en la Pared se subió al escenario para cerrar a puro rock el encuentro comunitario.
Así como les contamos, las sonrisas no se perdieron en ningún momento del día, felices de construir juntos estas actividades barriales y autogestivas donde cada vez somos más voces que unidas creamos el grito poderoso más grande de Mendoza.
