20 enero, 2019
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«Mirá esto, macho»

 
 
Ustedes no lo van a creer, pero esta captura es un excel, un excel que distintas compañeras vamos completando cada día como se completa un formulario de inscripción, en este caso, a la muerte. Intenten descargarlo, asimilarlo, soportarlo, tragarlo, gritarlo. Una mujer, una verdadera suertuda que ayer pudo volver, va tipeando línea por línea cada relato salvaje, bajando despacito la mirada por los patinosos escalones del miedo, para no ser arrastrada por esta catarata de sangre que ahora circula sólo por canales de televisión. Pasó Thelma y no pasó nada, pasó su voz, pasaron otras.
 
 
Pero el próximo nunca sos vos.
Las próximas siempre somos nosotras.
 

* Tras los deseos del próspero 2019, Celeste Castillo recibió dos balazos del policía Héctor Montenegro.
* Tres días después, Valeria Juárez cayó a los pies de su padre, Elías Juárez, que le metió un escopetazo.
* Dos días después, Daiana Moyano apareció estrangulada y violada por su vecino, en un descampado.
* Un día después, Joselín Mamani pasó de tener 10 años a tener 32 puñaladas, se sospecha, por su padrastro.
* Un día después, Gisel Varela fue acribillada en la calle también por su ex pareja, Sergio Cejas.
* El mismo día, Liliana Loyola murió prendida fuego por su propio hijo, Juan Echegaray.
* Cuatro días después, Susana Yas soportó los últimos golpes de su vida a los 77 años, en su departamento. 
* Dos días después, Agustina Imvinkelried fue enterrada viva por Pablo Trionfini, que se sucidió.
* Un día después, Danisa Canale se volvió víctima de su marido, Jorge Tossero, que la mató a martillazos.
* Un día después, Romina Ugarte fue asesinada por el policía Nicolás Agüero, que le disparó a la cara.
* El mismo día, una NN perdió la vida y el nombre, incinerada en un descampado de Guaymallén, Mendoza. 
* Un día después, ayer, Carla regresó flotando en el Riachuelo, gracias al botón que no acudió al pánico.
* El mismo día, ayer, Silvia Pereyra se desangró por los 3 cuchillazos que le propinó Guillermo Pellegrineti.
* Y hoy, ¿hoy cuántas veces nos van a decir exageradas?
 

Puede ser usted, señora, cualquiera, sólo por estar siendo, sólo por no ser él. 
Ahora otra compañera debe estar abriendo el excel.