Aunque el Presidente de la Nación haya vetado la ley de expropiación del edificio, aunque el hostigamiento judicial no termine nunca, aunque la saciedad empresarial tenga respaldo gubernamental y aunque en 2015 la cooperativa pagaba $25mil de luz y hoy paga $350mil, las y los 220 trabajadores resisten y seguirán resistiendo contra el peor despojo.
El Bauen no se toca…
¡Y al carajo con el desalojo!