El pasado lunes 16 de septiembre familiares de víctimas de gatillo fácil y organizaciones sociales concentramos frente a tribunales penales acompañando a la familia de Miguel Reyes Pérez, para exigirle al poder judicial la fecha de inicio del juicio por el asesinato del joven, víctima del accionar violento de dos agentes de la policía Tucumana.
Miguel murió el 16 de enero del 2017 luego de haber agonizado 23 días producto de la golpiza que recibió en la víspera de Navidad por parte de Mauro Navarro y Gerardo Figueroa dos agentes de la motorizada que estaban prestando servicio para la comisaría 4ta.
Tras dos años y ocho meses su familia le exige a la justicia que actúe rápido para que se llegue al juicio oral.
Luego de mucha presión en las calles y en los pasillos de tribunales, finalmente notificaron a Ana Reales, mamá de Reyes, que el requerimiento a juicio de la causa está firme luego de que la cámara haya dado lugar al pedido de la fiscalia y no haya dado lugar a las apelaciones de la defensa de los acusados. Ahora queda esperar el sorteo de sala.
Convencida de que la lucha se da en las calles y poniendo el grito bien alto Ana sigue diciendo: «quiero justicia para mi hijo ¡quiero el juicio ya!».
