Con las manos en la masa, los pies en el barro y las ansias de justicia social en el pecho, las vecinas del barrio Los Pumitas nos organizamos e hicimos nacer un nuevo emprendimiento: inauguramos “Caseritos”, nuestra poderosa cooperativa de panificación para paliar este duro contexto. «La idea de comenzar este proyecto surgió de la necesidad de tener un trabajo digno, cocinando lo que sabemos hacer y demostrando que las y los villeros no queremos ‘todo de arriba’ como algunos dicen; que sepan que somos mujeres que no nos damos por vencidas, nos organizamos y salimos adelante» cuenta Sole, vecina del barrio Los Pumitas.
Nuestros mejores productos son el compañerismo, la sororidad y la empatía para que cada compañera pueda poner sobre la mesa un plato de comida. Desde nuestras historias distintas y diversas, nos unimos para volvernos una sola porque venimos del mismo barro y amasamos un futuro donde tener un trabajo digno no sea una utopía y a nuestros hijos no les falte la comida, donde no tengamos que hacer lo imposible para poder estudiar y no nos veamos obligadas a ser las únicas que realizamos las tareas de reproducción y cuidado, donde podamos generar espacios de contención. Con la dignidad y la alegría como piso y con nuestros sueños sin ningún techo.
Cocinamos el pan relleno de cada día, la pastafrola de cada tarde y las galletitas para la leche. ¡No te quedes con las ganas! Probá los mejores panificados, bien desde abajo, bien Caseritos.
Nos encargás al: 3416575705
