Somos tus ganas de escuchar, somos tu voz y tu agite, somos la potencia de gritar. Somos tu irrupción en la tele, somos tu grito en la radio, somos tus escritos en el diario. Somos la calle tomada, somos la poca justicia recuperada, somos el orgullo de ser travas. Somos el lugar que nos dejaste para que entremos todas las desacatadas. Somos las normas impuestas que rompiste, para que despleguemos nuestras alas.
Somos tus raíces salteñas, tu valentía al escapar de casa por una vida verdadera, el motor que transforma desde el amor, la identidad que quisieron callar y se hizo ley, la fuerza que no pudieron frenar. Somos; en la política, en las casas y en la escuela. Somos las alas de las que recién vuelan. Somos los abrazos y la familia, la independencia del laburo digno, el grito y la furia poderosa. Hace cuatro años que nos falta tu voz pero fundamentalmente nos faltás vos, comandanta de las mariposas.