24 abril, 2020
,

Doble de riesgo

 

En los barrios populares cuesta llegar a la tercera edad, sino basta comparar con otros lugares el índice de longevidad: entre Zavaleta y Recoleta hay ¡20 años de diferencia! Y sí, no hay mucha ciencia: toda la vida poniendo el lomo a destajo para ganar el pan, sin importar un carajo cómo están, cuánto les cuesta, qué necesitan, ¡no hay respuesta ante lo que gritan! Con su noble condición y su doble exposición, las abuelas y abuelos de las villas deben refugiarse y en el Bauen hay lugar disponible, pero lo esencial es invisible al Gobierno de la Ciudad, que decide ocultar el hacinamiento.

 

¿Quieren cuidar a las personas mayores?
¡Aseguren el aislamiento!