* Por María Claudia “La Negra” Albornoz, referenta de La Poderosa.
La memoria de nuestra gente sigue activa y más fuerte que nunca. La memoria es lo que te hace saber quién sos, te hace ser consciente de tu historia y todo lo que sucedió en esos momentos. Por eso es tan importante recordar lo que sucedió el 29 de abril de 2003. En la ciudad de Santa Fe había más de 44 mil mujeres jefas de hogar; veníamos remontando una crisis económica durísima e intentábamos salir adelante. En ese mismo momento, se nos coló el río por una defensa que los gobiernos dejaron abierta y que fue destrozando todo a su paso: nuestras vidas, nuestra historia, nuestras casas y nuestras cosas. Durante estos 18 años se mantuvo viva la memoria y por eso era importante luchar para que tomara trascendencia de ley. Así íbamos a lograr que el Estado reconociera esa memoria. Esto parece básico y simple, pero fue muy difícil de lograr. Sin embargo, lo conseguimos. No bajamos los brazos en ningún momento hasta que ayer se sancionó esta ley que permitirá que en todas las escuelas de Santa Fe se pueda estudiar qué pasó ese 29 de abril de 2003, que se lo recuerde como el Día de la Memoria del Pueblo Inundado para que las y los pibes entiendan lo que sufrimos en la provincia. Es muy importante en lo simbólico y también para nuestras vidas, porque es un gran reconocimiento a la lucha desigual, que es contra gigantes poderosos, pero acá también se muestra como el vecino y la vecina que recorre el barrio, que la pelea día a día, que lucha por un trabajo, por una vida mejor; es enorme haberle doblado el brazo al poder y lograr una ley para que el 29 de abril quede clavado en el calendario escolar, que todo el pueblo conozca su historia y nadie se confunda.
Nos quisieron olvidar,
pero la memoria no se inunda.