En el Palacio de Tribunales de la Nación, exigimos justicia por Lucas y todos los pibes asesinados por las Fuerzas de Seguridad.
«Soñaba con llegar a Primera y comprarme una casa. El arma de mi hijo eran los botines gastados. Lo acribillaron, me lo arrebataron. Quiero que no nos dejen solos y que se haga justicia, para que nunca más haya un Lucas», Cintia, madre de Lucas González.