* Por Juan Carlos Jiménez Rufino. La Mona Jiménez
Tras una década de búsqueda, que una familia como la de Facu siga sin respuestas, es terrible. Es terrible no saber qué pasó con tu hijo. Yo ya soy abuelo, mis nietos salen solos a otros bailes, van a distintos boliches, ¡no puedo ni pensarlo! Es necesario que estos casos no queden en la nada, y para eso hay que seguir pidiendo respuestas y exigiendo justicia.
Durante la dictadura, a nosotros nos llevaban por hacer bailes populares. A mí me tenían fichado por ser el que cantaba “Cortate el pelo, cabezón”. Imagínense… por la tontera de la letra, ya era una amenaza para ellos. No la pasamos bien. Sabemos lo que ocurre con las Fuerzas de Seguridad y los pibes más humildes en los bailes.
A Viviana, mamá de Facu, le mando un fuerte abrazo y le agradezco de corazón por haber criado a un buen pibe, cuartetero y monero. Y como sé que va a leer esto, le hablo directo a ella… Viviana, no bajes los brazos, por tu hijo y por cada familia que hoy se siente identificada. ¡Muchas fuerzas en esta lucha que hoy te toca llevar!