Hoy es 13 de mayo en Rosario. Sólo en abril hubo 34 muertes sucedidas a causa del narcotráfico. En 2022, 103 crímenes en manos del Estado Narcopolicial.
Es 21 de abril en Rosario, y una beba y su abuela son heridas tras una balacera. Cuando comienza el enfrentamiento en el barrio, ellas simplemente están en la vereda. La abuela les grita que “frenen”, pero los disparos no se detienen. Ella muere dos días después.
Es 15 de abril en Rosario, y una mujer espera para hacer las compras en el almacén. De repente, un hombre la utiliza como escudo: lo están persiguiendo en medio de una disputa. Le disparan a ella, y las balas impactan en su pierna y clavícula.
Es 13 de abril en Rosario y vecinas deciden suspender actividades. Los tiroteos están a la vuelta de su casa y tienen miedo de salir a la calle.
Es 31 de marzo en Rosario, varios pibes están comiendo un pollo al disco en la puerta de la casa de uno de ellos, después de jugar al fútbol. Pasaron en moto y les descargaron una ametralladora. Los balearon porque se confundieron de casa.
Es 12 de mayo en Rosario, llegaron Jueces Federales de todo el país, llegaron miembros de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y del Consejo de la Magistratura para debatir sobre narcotráfico, argumentando que “esto no da para más”. Como si ellos no hubieran hecho nada para determinar este destino.
Después de las balas, sigue el silencio político. ¿Hasta cuándo?
