Durante este jueves, docentes de Lomas de Zamora, realizaron un paro frente a la represión sufrida ayer y la situación de inseguridad e infraestructura que vienen denunciando hace tiempo.
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El martes a la noche, ocho personas armadas entraron en el Instituto Superior de Formación Docente y Técnica nº 103, en horario escolar. Golpearon a un estudiante y gatillaron varias veces; por fortuna, no salió ningún disparo.
Ayer, docentes y alumnos se convocaron en Puente La Noria para exigir seguridad. ¿Cuál fue la respuesta de la Policía Bonaerense?
Disparar a mansalva. Sí, ¡le dispararon a docentes y estudiantes!
Gabriela Capurro está en 3º año de Geografía y sufrió en carne propia la violencia policial: “Cuando llegamos había un cordón policial. Intentamos hablar, les contamos que el día anterior casi nos matan, y de repente empezaron a disparar. Le dieron dos balazos de goma en la cara a un profesor y a un nene de 12 años que estaba con su mamá. Le pegaron a varios compañeros, nos tiraron gases y nos dejaron con los ojos irritados: recién pasada una hora pude volver a ver bien. Se llevaron detenidas a dos personas: a un profesor, Diego Acuña, al que liberaron recién a las 10 de la noche, y a una estudiante que soltaron enseguida porque se dieron cuenta de que está embarazada”.
Lo que sucedió el martes no fue un hecho aislado. La zona está liberada hace años; de hecho, se acordó reducir la cursada y que el horario de salida sea a las 21:15, por seguridad. “Los robos son diarios: hace una semana habían ocurrido cinco robos en dos días”, cuenta Gabriela, y agrega: “Los colectivos no llegan a la escuela, nos dejan a cuatro o cinco cuadras. La electricidad se corta constantemente. No podemos ni calentar agua en una pava eléctrica porque estallan todas las instalaciones. Y sin luz estamos regalados. Venimos reclamando hace años, pero no hay respuestas”.
La Policía de Provincia de Buenos Aires es responsable de esta situación. La educación no se reprime, se defiende. Si siguen los disparos, seguirán los paros.