5 julio, 2022
, NUNCA MÁS

EL DÍA QUE FRACASÓ LA IMPUNIDAD

Un 5 de julio de 2012, en horas de la tarde noche, se vivían momentos de tensión y expectativas en el Tribunal Federal VI. Se daría a conocer la sentencia por el juicio oral en la causa “Plan sistemático”, en donde se investigaban más de 30 hechos de apropiación de menores en la última dictadura cívico-militar argentina. Entre las personas acusadas se encontraba Jorge Rafael Videla, quien venía de una larga data de procesamientos, aunque con pocos juicios activos por delitos de lesa humanidad.

Se acercaba el momento y, en las afueras del recinto, vecinas y vecinos de distintos barrios y organizaciones aguardábamos por pantallas gigantes el comienzo del fin de la impunidad. De repente conocimos la sentencia: el tribunal, integrado por los jueces María del Carmen Roqueta, Julio Luis Panelo y Domingo Luis Altieri, condenaron a Jorge Rafael Videla a 50 años de prisión y a otros 8 represores a penas que fueron desde 5 a 40 años de cárcel.

Videla murió en prisión 10 meses después, condenado en sólo 3 causas y procesado en 21, con más de 1300 víctimas de torturas, homicidios, robos, desapariciones y apropiación de hijas e hijos de desaparecidos en su historial. Murió maldecido en boca de una humanidad que todavía recuerda a las y los 30.000. Videla murió, también, con la carga de miles de hogares desmantelados a fuerza de topadoras a través del Plan de Erradicación de Villas.

A 10 años de aquel fallo histórico, hoy no sólo decimos “Nunca Más”: exigimos no volver ni un paso atrás. Ya no toleramos el 2×1 a genocidas del macrismo, ni la prisión domiciliaria a tantos represores, ni el silencio que se llevó a la tumba Etchecolatz. Hoy seguimos pidiendo juicio y cárcel efectiva para todos los responsables y culpables de ese período devastador: en la trinchera de la lucha de las Abuelas y Madres, la impunidad y la desmemoria no pasarán.

No pudieron,
¡no podrán!