“En la salud y en la enfermedad” no cuenta para el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. El acceso al sistema de salud se vuelve cada vez más complicado en las villas y barrios populares de la Ciudad de Buenos Aires. El Gobierno de la Ciudad es el responsable de esta realidad que vulnera nuestro derecho a la salud, se excusa en la falta de personal cuando son quienes deberían contratar más gente.
Los residentes y concurrentes se vienen movilizando hace meses por mejores condiciones laborales y salariales. En los barrios, las vecinas y vecinos hacen filas interminables de madrugada para quedarse con las manos vacías, sin turnos ni medicamentos.
Eliana Cabrera, vecina de la Villa 31, afirma que “tenemos tres CeSACs pero no hay turnos para la cantidad de vecinos que hay. La mayoría sale a las cuatro de la mañana a amontonarse para conseguir alguno de los pocos turnos que dan. La atención de salud mental no es buena, yo fui a dos diferentes a preguntar por psicología y me dijeron que tenía que ir afuera del barrio. Además, si vivís en cierta parte del barrio no te dejan atenderte en otro CeSAC y no hay profesionales de todas las especialidades en todas las salitas”.
María Belén es promotora de salud, vive en el barrio Rodrigo Bueno, y cuenta que “no hay hospital ni salita, hay una posta sanitaria en la cual la atención es muy escasa. Solo tenemos cuatro especialidades y no te atienden, te dan turno para ir a hospitales o a otros centros. Para acceder a los medicamentos hay que ir a otro centro de salud. La respuesta que dan es que hay falta de personal médico”.
La salud es un derecho y el Estado es el responsable de garantizarla. Basta de precarizar a las y los profesionales de la salud, el sistema sanitario se sostiene gracias al trabajo de residentes, concurrentes y promotoras y promotores. ¡Al gran pueblo argentino SALUD!