Hoy la Asociación de Enseñanza Media y Superior (Ademys) realizó un paro docente frente a la Jefatura porteña.
Amanda Martino, Secretaria General Adjunta del sindicato y docente de nivel medio y superior, sintetiza los motivos: «Es un cúmulo de reclamos y da bronca, porque el Gobierno de la Ciudad en su campaña electoral sigue insistiendo que la prioridad está en la educación, cuando la realidad contrasta enormemente. Y se puede ver desde las condiciones en las que trabajamos y estudiamos, las condiciones salariales y el presupuesto que se asigna a la educación».
El Gobierno de la Ciudad había establecido un bono para todos los docentes que no se adhieran a los paros, ni se tomen licencias. «Tenemos el derecho de protestar y a hacer huelga. Si lo hacemos es porque en la educación está todo mal y hay un responsable que es el gobierno. Partimos de la base que tenemos salarios de pobreza. Por ejemplo, el de una maestra de jornada simple no cubre la canasta básica. Presionan a la docencia coartando el derecho de protestar. Te extorsionan con el descuento y es ilegal», sostiene Amanda.
«Al que protesta, palo y represión o te descuentan el sueldo. ¿Cómo es esto entonces? ¿Si alguien tiene un reclamo no va a poder protestar? Este es un tema también central que lo estamos viendo desde Jujuy», finaliza.
Federico Puy, maestro de primaria del Normal 5 y secretario de prensa de Ademys profundiza sobre cómo está la educación pública: «Sigue habiendo más de 30.000 niños y niñas que no tienen la posibilidad de acceder a una vacante en el nivel inicial. Estamos exigiendo que se construyan escuelas de todos los niveles y que se termine el ataque a los institutos de formación docente, donde han cerrado cupos y carreras como psicopedagogía o nivel inicial. La alimentación que se da es pésima, sin nutrientes. Y necesitamos un psicólogo por escuela como un plan de emergencia para poder atender las diferentes problemáticas de los chicos y las chicas».
«Nosotros entendemos que muchas familias tienen que ir a trabajar, tienen que dejar a sus chicos en la escuela. Pero queremos decirles que la lucha es por mejorar la educación pública y que hay que darla en común y organizándonos. Haciendo movilizaciones comunes, participando también de las peleas que las familias dan por vivienda, por trabajo, por salud, para poder unir todas las demandas de la gente trabajadora y que no nos dividan los de arriba», concluye Federico.
