Dale, que en las ranchadas con los pibes y las pibas, tomando mates con tu vecina, charlando con el kiosquero o la verdulera, incluso en las charlas con tu pareja, no hay que tener miedo de mencionar que en lo que queda del año vamos a tener que pensar qué futuro queremos para nosotras y nuestros vecinos.
Y en celebración del natalicio de Julio Cortázar, qué mejor que algunas instrucciones…
Dejando de lado las diferencias, descubramos la mejor manera para investigar y debatir. Entendamos lo importante de ejercer nuestro derecho a través del voto. No dejemos que predomine la pereza o la indiferencia, ¡la democracia se ejerce y se celebra!
El periodo de elección puede generarnos emoción y esperanza pero en algunos, se presentan sentimientos alejados del entusiasmo y con desilusión. ¿El objetivo? ¡Transformar esa situación!
Votar consiste en concurrir con el DNI hasta la escuela asignada, podés planearlo como un recorrido e ir con familia o amigos, acordate que ese día el transporte público es gratuito.
Una vez allí, buscás tu mesa, a veces te puede tocar esperar, pero en la fila siempre hay alguien para charlar, y si con algún adulto mayor te encontrás, seguro te va a contar que aunque esté exento de votar por su edad, no piensa dejarlo pasar porque durante la dictadura militar hasta en voz baja daba miedo hablar.
