El pueblo de Haití sufre una brutal crisis humanitaria, económica y política: mientras más de 4.3 millones de haitianos padecen de inseguridad alimentaria, las pandillas tomaron el control del 80% de Puerto Príncipe, su capital. Según un informe de Naciones Unidas, en lo que va del año fueron asesinadas 2.400 personas y se registraron al menos 300 secuestros de menores y mujeres por parte de estos grupos.
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En medio de este terror social, el Primer Ministro, Ariel Henry, solicitó apoyo militar extranjero. Ante este pedido, el Secretario General de la ONU, António Guterres, insistió en la urgencia de un despliegue de fuerzas internacionales. Sin embargo, las pasadas intervenciones en el país no han logrado estabilidad ni paz social. Por el contrario, profundizaron la crisis.
Jackson Jean, periodista haitiano, explica el avance de las bandas armadas y las consecuencias que traen las intervenciones en el país. ¡Desde nuestros barrios apoyamos la lucha por la soberanía y la autodeterminación del pueblo haitiano!
