La alegría nos recorre el cuerpo entero, porque desde nuestro feminismo villero venimos luchando incansablemente por nuestra libertad, y este resultado es fruto de una lucha colectiva de muchísimos años, soportando tantos daños y resistiendo en cada grito que surge desde abajo.
El aborto es legal, seguro y gratuito,
¡y la clandestinidad al carajo!