Seguimos hablando de alquileres. Y nunca con una buena noticia. Juntos por el Cambio, el Interbloque Federal y el Frente de la Concordia, aprobaron en la Cámara de Diputados cambios en la Ley de Alquileres, en los cuales se reduce los contratos de tres a dos años y se permite un ajuste en el costo cada cuatro meses. Ahora pasará al Senado para su deliberación.
Gervasio Muñoz, presidente de la Federación de Inquilinos Nacional, dijo: “Las y los inquilinos estamos en una situación muy grave en términos económicos, pero en cuanto al derecho al acceso a la vivienda estamos en medio de una guerra total entre el mercado y las organizaciones inquilinas”.
Magalí Zirulnikoff, integrante de la Comunidad Federal Inquilina y No Propietaria, explicó: “La vivienda propia se fue quedando fuera del alcance de los salarios de la clase trabajadora, además está dolarizada y los salarios fueron devaluados en forma consecutiva”.
Fabiana Colman tiene 22 años y es vecina de Villa Soldati. Sobre la situación habitacional en los barrios populares y las villas, dice: “No podés alquilar fuera del barrio. Un salario básico está en 80 mil pesos y al buscar alquiler mínimo te piden 150 mil más expensas. Si la clase media, media baja, ya lo ve imposible, imagínense nosotros que vivimos en una villa”.
