Ante todo

Damas y caballeros, solemnes ensayistas de los ecosistemas villeros que investigan como rupestres fenómenos biológicos, sometiendo a revisión sus fundamentos epistemológicos, rogamos acepten la cordial propuesta de analizar científicamente los paradigmas de esa moral impuesta por dogmáticos y catedráticos, desde las teorías doradas que iluminan las condiciones socialmente determinadas, sin socializar las determinaciones condicionales, que determinan los condicionamientos sociales.

 

Bien, nos propusimos escribir un primer párrafo que no entendieran todos, para atrapar la atención del tribunal moral de modos. Porque somos malísimos repitiendo lo que otros dijeron, pero somos muy buenos apagando el humo que nos vendieron, así que no esperen citas de los autores que citaban pensadores, que citaban Dioses, que ahora citan los profes. No, no tenemos un gran bagaje teórico acumulado, ni la diplomacia de la burocracia con aire acondicionado. ¿Está mal? Ni siquiera sabemos qué carajo significa el índice Merval, el Ibex o el Riesgo País, pero sabemos que han meado durante años el problema de raíz: todavía seguimos esperando los caños que se lleven el pis. ¿Y saben qué? No van a lograr que los tratemos de Usted. Porque mientras sigan imponiendo sus prioridades a nombre de la educación, ser unos maleducados seguirá siendo nuestra mejor opción. Tal como cuando abrimos La Garganta en Zavaleta, desobedeciendo a los que cagaron al periodismo en todo el planeta, ahora pateamos los manuales de la necedad ante la santidad de sus ahorros, esa “realidad” que nos prefiere pibes chorros.

 

Shhh, cállense, degenerados, atrevidos, indocumentados, ¡están evidenciando la educación decadente! No, estamos diciendo que la moral miente, porque no hace falta ningún doctorado para darse cuenta que la academia sigue siendo el semillero del mercado, un pedazo de infraestructura donde los excluidos pueden ir cada tanto a dar ternura. ¿Y a dar cátedra? Nooo, qué locura.

 

Muy bonita la revista y sus puntos de vista, pero siempre “en voz baja por favor”, no vaya a ser que se asuste algún solemne orador. O que empiece a temblar, cuando descubra que los negros sabemos hablar. Hay cínicos de verdad, atrincherados en el ficticio universo de cualquier universidad, para perpetuar el silencio de los villeros y renovarle la concesión al kiosco de los voceros. ¿Acaso desde el campo ilustrado han amplificado nuestras voces o nuestras cooperativas de trabajo? ¡Corran el culo entonces y dejen subir a los de abajo!

 

Históricamente, han intentado adiestrarnos como mascotas, tanto que les dejamos todas las reglas rotas. Y entonces decidimos mear en su pedestal… Vamos a construir una cultura de lo anormal. Vamos a ser el grito que los desplome. Vamos a cagar donde se come. Vamos a festejar el cumple de Fidel. Vamos a limpiarnos con el mantel. Vamos a combatir la pasta base. Vamos a eructar en clase. Vamos a ir a contramano. Vamos a meterles un gol con la mano. Y al final vamos a demostrarles que, sin ningún tutor, nos portamos mucho mejor.

 

La quijotesca clase dominante y la clase media que se monta cual Rocinante cabalgan tras el dinero y el ego, las dos zanahorias que el sistema les ofrece a los pendejos, mientras dice que los pobres nos reproducimos como conejos. No aman. Consumen. Cagan, pero no lo asumen. Y tan apartados de la miseria que existe, necesitan un diario para encontrar una mirada triste, una inundación o el cuerpo que mancilló una violación. Sólo con eso, tienen un “fotón”, porque hacen comunicación con la misma liviandad que sacan conclusiones, desde el cómodo lugar en el que están, defendiendo las buenas costumbres que aprendieron del “qué dirán”. Ojo, igual tenemos un plan para alimentar la esperanza: nos enseñan el protocolo, cuando tengamos llena la panza. ¡Pero el problema son los modos, el tono y las palabrotas! Que no rompan las pelotas.

 

¿Por qué los ricos pueden hablar de la pobreza con el mismo temple que hablan de la Revolución Francesa, entre aires de superación y arrogancia? ¡Porque las tienen a la misma distancia! Pero cambia la cosa, señora, cuando se escribe a mil por hora, con la mierda flotando junto a la computadora. ¿Pensaba que vivíamos haciendo grandes tapas? No, vivimos destapando cloacas.

 

Alta sociedad. Si sólo conducen los académicos en los medios, la política y la universidad, ¿quién interpreta nuestra realidad? ¿Qué le deja a la hija de la vecina una tesina que nos toma como objetos inanimados? ¿Quién ordenó que los pobres trabajen para los graduados? ¿Tendrán posgrados en acostarse sobre colchones mojados? ¿Sabrán sobrevivir sin ambulancia? ¿Y al estigma de la vagancia? ¿Planearán embarrarse también, para llevar el barro a los barrios donde vive el Bien? ¿Nos seguirán hablando del karma, cuando descubran que no tenemos timbre, ni alarma? ¿Qué cosa fuera, la villa sin afuera? ¿No hay cierto progresismo genial que nos exprime? Menos pregunta el capital, y reprime.

 

Ayer, querían discutir la inseguridad en el Ministerio de Seguridad, como si de verdad existieran centros de rehabilitación buenos y gratuitos, para que no sigan siendo fortuitos los rescates en los combates que conforman el núcleo del meollo. Hoy, la inseguridad debe discutirse en el Ministerio de Desarrollo, porque sólo así, algún puto día, al anochecer de la hipocresía, daremos por finalizados en los medios de comunicación, todos estos debates plagados de ciencia ficción y guionados cada semana por el misterio que suele escurrirse en la hipocresía. Mañana, la inseguridad debe discutirse en el Ministerio de Economía.

 

Y por lo pronto, con firmeza, nos oponemos a la cosificación de la pobreza, porque el altruismo causa daños importantes cuando echa a correr sus blancos elefantes, adjudicándose una supuesta maestría, que sólo encubre su egolatría. ¿O hasta cuándo vamos a creer que los políticos deben ser “profesionales”? Tal vez, hasta que todos los intelectuales hayan terminado de leer todo eso que quieren saber, antes de escribir un texto que vos también puedas entender.

 

La caca huele mal, pero el problema estomacal nace con el menú del restaurante: auto caro, casa gigante y pilcha careta, acompañan la zanahoria berreta de cada desayuno, mientras otros eligen fumarse uno, disfrazarse del Che o “atacar al imperio” revolviendo un café, con azúcar o con sal, porque total, todos se vuelven a encontrar en el mismo lugar. Y no precisamente celebrando una revolución, sino mirando tetas por televisión, puesto que todo conduce a la misma ostia y al mismo vino, tras ese largo camino de los escritorios hasta los barrios sin caños, “núcleos habitacionales transitorios” hace más de 50 años… ¿Qué hacemos? Respiremos, todavía: si el peronismo se hizo masas como tercera vía y la Tercera República de Venezuela alcanzó una utopía, tal vez haya una tercera clase media que transforme a la Argentina, dejando atrás el uniforme y la exitoína.

 

Corte, corte, corte. ¿Vieron qué bajón, la generalización? Ahora ya saben cómo se siente ser la clase desclasada, la cultura despreciada y la cuenta pendiente de cualquier década ganada, perdida o empatada. Sin egoísmo, ni pesimismo, la realidad se transforma, pero van a tener que hacernos un lugar en la misma plataforma. Porque el desarrollo social no se trata de cambiarnos los olores, ni de calmarnos los dolores, ni de corrernos con los codos del presupuesto, para que la coartada no huela mal: nuestros modos son el impuesto a su tan preciada moral.

 

 

 

 

 

 

32 comentarios sobre «Ante todo»

  1. Hola
    Escuche la iniciativa que estan llevando adelante con ChequeEnBlanco, tengo una cantidad de libros para donar.
    Espero se contacten para coordinar la entrega.
    Saludos.
    Carlos

  2. hola que tal buenas tarde quería preguntarle si podía realizarle una entrevista ya que estamos haciendo un trabajo en la universidad arturo jauretche somo estudiantes de salud.

  3. líderes genios! idolatría por ustedes, pares míos de abajo, bien educados marginal y mentalmente. Un apoyo y un respeto incondicional hacia la poderosa que me hace llenar de orgullo llevar el estandarte revolucionario por el barrio. Ese grito real de la clase más baja, de los que patean la vida para llegar a conseguir un poco de lo que aspiran los de más arriba. Ese rugido de tripas con hambre que manchan los vidrios de los restaurantes.
    No soy un letrado, soy un pibe que morfa un sanguche de fiambre y lo pasa con una botella de jugo, no da para más, todo va para arriba y los que no llegan quedan cada vez más abajo. No seré universitario pero conozco todas las calles de mi hermoso Tucumán que siempre será mi facultad. Ricos cada vez más ricos. y pobres que no pueden controlar ni mantener a sus hijos que están más metidos en esa droga de porquería que queda al fondo de la hoya, inducidos a la delincuencia para poder conseguir más. presos, zombis de este sistema capitalista que busca como exterminar al para nada afortunado materialmente.
    Quisiera saber como poder ayudarlos mejor sin ser por una red social en las cuales no soy popular, desde mi humilde barrio, desde mi humilde pueblo tucumano. Aguante el Chizzo, el Indio, el rocanroll de los pibes, de los desangelados, y mucho más Aguante La Poderosa Carajo!!!

  4. Hola Muchachada de la Garganta, cómo consigo el libro de ustedes che??? Un poderoso abrazo para todas y todos. Santiago desde Andino.

  5. Queridos hijos de este Pueblo, los acompaño con mi corazon y mis actitudes que trato sean coherentes con mi sentimiento que he sostenido en toda mi vida , he visto y sentido a «mi pueblo de espaldas en los 90», pero haber estado del otro lado del mostrador me permitio desarrollar lo mejor que tengo entre los tantos defectos que tambien poseo por supuesto.Los abrazo

  6. Excelentes palabras.
    Los estudiantes de la Universidad Nacional de Quilmes tenemos un programa de radio,nos gustaría contar su experiencia.
    ¿Cómo nos podemos contactar con el colectivo?

    Saludos,
    Cristian López

  7. Los sigo en Facebook desde hace mucho, y los admiro profundamente, ustedes han hecho del periodismo un orgullo, su forma de redactar, de decir verdades terribles con ironía fina, de mostrar la verdad por encima de todo y de todos, en un país donde el periodismo se ha convertido en un show, o en terribles mentiras encubiertas, donde los programas como el de Tinelli (por dar un ejemplo) degradan y subestiman al ser humano mostrando como los participantes se dejan decir cualquier aberración con tal de tener unos minutos de cámara. Con periodistas que usan el condicional para decir cualquier acusación que saben que es mentira o no está probada, ustedes hacen un periodismo de calidad que podría enseñar a muchos que se creen grandes profesionales. Yo viví la época cuando Onganía decidió que en la capital federal no debía haber villas, y arrojó con camiones del ejercito en Av. Provincias Unidas entre Necochea y Avellaneda, en cuchas prefabricadas a cientos de familias, con puertas donde no entraban los muebles de lo pequeñas que eran. En mi vida he vivido muchas cosas difíciles y la he encarado siempre por el lado de la lucha y sin dejarme caer. Ustedes, cuando los leo, me enorgullecen, porque tienen el mismo concepto de tengo yo de la vida, pero no tengo voz para expresarlo, el amor al más débil, el respeto por los demás, el espíritu de lucha, el orgullo de defender lo que opinan, y como decía mi amado padre el conocimiento intelectual, cosa que nada ni nadie nos puede quitar, aunque nos saquen el dinero, la casa el trabajo, y nos dejen tirados, la capacidad de pensar con la mente abierta, de analizar las cosas y no comprar lo que nos cuentan, eso no no los puede quitar nadie. Desde ya un abrazo a la distancia, y los seguiré leyendo y admirando por siempre.

  8. Isfa Manuel Belgrano (Instituto Superior de Formación Artística) Escuela de Bellas Artes Manuel Belgrano.
    Donde funcionan nivel medio y terciario en el Barrio De Barracas, La Boca.

    Resistí me dijeron cuando nací,
    resistí cuando empecé a crecer,
    resistí cuando te quedaste sin laburo,
    resistí para poder seguir estudiando,
    resistí cuando logré trabajar en condiciones laborales precarias,
    resistí cuando el estado me volvió a precarizar.
    Hoy resisto pero lucho, hoy resisto y no me cayo.
    Algún día voy a dejar de resistir…algún día.

    La Escuela de Bellas Artes está en conflicto permanente docentes estudiantes seguimos luchando por la Educación Pública.
    Se realizó el día de ayer 29/06, Clase pública luego de 7 días sin luz ni agua.
    Todos juntos decimos NO al vaciamiento y a la precarización y SI a la Educación Pública. La lucha continúa!
    Este viernes vamos a marchar desde la puerta de la escuela al medio día, al ministerio de educación.
    Hoy ya se restableció la luz, hoy seguimos igual de precarizados, hoy y todos los días seguimos luchando,
    porque una escuela que se defiende también está educando.

  9. Les leo desde una provincia rica en un montón de recursos y pobre en el aprendizaje histórico, ya que hace 55 años que gobierna el mismo partido político y si a eso no le llamamos clientelismo político no sé como llamarle: tenemos lagos vendidos, ríos contaminados con mierda, fracking y basureros petroleros, minería a cielo abierto, una capital con todos los supermercados que se encuentran en el país en contraste con las escuelas sin techo, la universidad sin gas; aumento impresionante de transporte, luz y gas, siendo la provincia proveedora de energía para todo el país. Les leo, y ahora escribo, desde mi posición de estudiante y futura docente de las letras que ve en sus palabras verdades que muchxs callan de una manera sumamente poética, escatológica y me encanta. Gracias por su escritura, ojalá nunca se termine. Abrazos desde Newken, tierra mapuce que de a poco también va encontrando su voz y haciéndose oír, gracias a las nuevas generaciones que no se dejarán avasallar. Gracias, en serio. Gracias por escupir este sistema…con rima, ironía, sarcasmo y verdades crudas que necesito leer cada vez que puedo! Siempre me enseñan algo.

  10. Me gusta mucho la forma de periodismo que inventó La Garganta poderosa. Soy periodista y tengo cada vez menos lugares donde publicar. ¿Reciben colaboraciones? En caso de que sí, ¿con quién hay que comunicarse?
    Felicitaciones por la revista y la actividad

  11. Hola! Mi nombre es Sabrina soy periodista de la revista EL Boletin de los canillitas, estoy interesada en hacerles una nota. Con quien me puedo contactar? Muchas gracias!

  12. Hola buenas noches, soy estudiante de psicopedagogia y queria saber como contactame con ustedes para hacerles unas preguntas sobre sus inicios, es para un trabajo de una materia social. Desde ya muchas gracias, espero su pronta respuesta.

  13. Mi más profunda admiración, al leer estas líneas escritas en prosa pero con un hermoso verso. No obstante interpreto, con mi carencia no sólo de gramática sino también de léxico, que la intelectualidad no debe ser vista como un caretaje o retroceso. El amor por la igualdad y justicia social no requiere academia. Mas sí entiendo que esos preceptos para no ser puro palabrerío ególatra, necesitan una metodología y unidad, que sólo formados conseguiremos. La formación es clave, para ayudar y ser ayudados, para lograr el altruismo que tanto necesitamos. (Altruismo: palabra que esta resistencia villera acaba de aclararme su precioso significado). Disculpen que no siga el verso, pero traté de redactar un comentario con tanta crítica como respeto.

    Abrazos para uds, ejemplo de redactores y actores sociales!

  14. Muchachos, hace rato los sigo en las redes. El otro día quise comprar la revista y pregunté en varios quioscos del centro y no la encontré.
    ¿Hay alguna forma de suscribirse para recibirla en casa?
    Sino seguiré buscando. Muchas gracias

  15. Por favor necesitamos utilizar las fotografías de la represión a la murga en la villa 1-11-14.
    Nos darían autorización para publicarlas, citándolos como fuente.

    Muchas gracias y saludos

    Fotografia
    Diario Tiempo Argentino
    011 4776 1100 (int.132 y 133)

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