Los Minis e Infantiles festejamos, incluso más eufóricamente que cuando Palermo le hizo el gol a Grecia, al enterarnos de que el lunes siguiente vendrían los chicos de la Rodrigo Bueno a jugar un amistoso. El primero que no pudo contener la emoción fue Pepe: “Les vamos a llenar el arco de gooooleeeees, ¡seguro que les damos un baileee!”. Claramente, iba a ser un amistoso vivido con intensidad.
Al fin llegó el momento, y en Retiro esperábamos, ansiosos, el arribo de los compañeros que asomaban desde el Sur, bordeando la costanera. De los partidos hubo mucho para ver, pero poco que se pueda contar fielmente; arte, magia, toques y más toques de ambos lados nos dejaron deseosos de ver más a todos los presentes. Entre tantos destellos de fútbol popular, empezó a hacerse de noche y había que parar la pelota, así que nos juntamos en la ronda para reflexionar sobre lo que había pasado en el partido.
Cual director técnico experimentado, Brian nos recordó la importancia de la localía en un partido: “Ahora queremos ir nosotros, seguro que en su barrio nos ganan ustedes. No es lo mismo jugar en la canchita en la que estás acostumbrado, que en una nueva”. Cris, del equipo visitante, se sinceró y reconoció que su desempeño no fue el ideal: “Sí, yo hoy atajé re mal, y en los entrenamientos me atajo todo, vengan este sábado”. Sin aspirar a ninguna premiación por Fair Play, Pepe nos emocionó adelantando un final cantado: “Yo creo que nos tenemos que dar un abrazo todos”. Después de demostrarnos con tanto afecto la importancia de ser compañeros, nos dimos cuenta de cuántas ganas teníamos de seguir compartiendo tiempo durante la merienda.
En la nueva ronda, la de las galletitas y el mate cocido, surgieron temas variados como la preparación de unos buenos pochoclos, unos cuantos chistes con Jaimito como protagonista, y un aplauso generalizado para Pechu, vecina de la 31 bis, que jugó para la Rodrigo Bueno y la rompió, demostrando que las rivalidades son puro verso.
Cuando todavía no estaba definida la clasificación de la selección argentina a octavos de final en el primer puesto de su grupo del Mundial, todos recibimos con entusiasmo la noticia de que, en la jornada del próximo domingo, si los resultados se daban como finalmente se terminaron dando, veríamos juntos el partido en una pantalla bien grande. “¿Y si Argentina no pasa?” preguntó Kevin, cortándonos un poco la respiración a todos. El calor mundialista llega a todos lados, pero no hay que dejar que nos dé fiebre ni nos atonte, y parece que Cristofer ya lo sabía: “no importa, lo importante no es que ganen, lo importante es que se diviertan”. Un crack.