Semanas atrás, el intendente de Río Gallegos, Roberto Giubetich, anunció la llegada de personal de la Subsecretaría de Planificación Territorial de la Inversión Pública de la Nación con el objetivo de avanzar en la urbanización de los asentamientos de la ciudad. Para ser exactos, fueron declaraciones durante el izamiento dominical del 31 de julio, y a los dos días siguió una rueda de prensa. Siempre la misma premisa: “Mejorar la calidad de vida” y “urbanizar”.
Hoy, los vecinos del barrio Madres a la lucha nos reunimos con el Secretario de Desarrollo Comunitario, Adriel Ramos, en el SUM de la manzana i. Nos movilizó la búsqueda de claridad y propuestas concretas a estas declaraciones.
La respuesta: un censo, uno más de tantos que hemos completado. ¿Acaso necesitan una encuesta para saber las necesidades que están a la vista? Además, vaticinaron promesas de interceder ante las áreas correspondientes por nuestros pedidos de luz, gas, cloacas, recolección de residuos y pavimentación.
Y siguieron las promesas: construir, en un año, un Núcleo de Inclusión y Desarrollo de Oportunidades (NIDO). Es decir, un espacio donde se puedan dictar talleres de oficio, deportivos y culturales. Ante esto, una vecina replicó: “Eso ya lo estamos haciendo en el barrio, entre los vecinos que nos organizamos en asamblea”.
Queremos pagar por nuestros servicios, que arreglen nuestras calles, tener calefacción. Queremos que no se generen más incendios producto de las malas conexiones eléctricas. Queremos la urbanización real, en vez de reuniones con gusto a poco, sin poder disfrutar el sabor de las acciones concretas.
