Hace 7 meses que Marta Ramallo dirige uno de los partidos más difíciles de su vida: Encontrar con vida a su hija Johana. Un partido que comenzó en 1 y 63, a pocas cuadras de la cancha de Gimnasia y Esgrima La Plata, club que desató el fanatismo de ellas por el Lobo. Con el apoyo de su cuerpo técnico conformado por amigos y amigas, enfrenta a una justicia misógina y machista que desde el primer momento se negó a tomar la denuncia de su desaparición porque argumentaron que “Johana se fue con un machito”.
En una cancha embarrada por la fiscal Bettina Lacki, que durmió la causa negándose a tomar una línea investigativa y con el estado como árbitro, cobrando para los más poderosos, Marta sale todos los días a pelearla en un terreno complicado. Sin la ayuda del secretario de Derechos Humanos de la provincia, Santiago Cantón, que no le otorgó importancia al caso, con la impunidad de la gobernadora María Eugenia Vidal que ridiculizó el pedido de audiencia presentado el 9 de Noviembre del año pasado, cuando envió su respuesta vía email y nunca la recibió en gobernación. Y contra la estupidez del intendente de la ciudad de La Plata Julio Garro, que se desvive haciendo declaraciones erróneas a la prensa, sin siquiera saber el nombre de Johana, y sin jamás haber hecho algo por la causa.
Sin embargo con todo en contra no podrán cortar la estrategia: Para hacerle un gol a la impunidad, que rompa con las redes de trata y desnude la complicidad estatal ¡Marta, tenés toda una hinchada que te apoya y te va a acompañar hasta encontrarla! Por eso hoy marchamos a gobernación, desde el Tribunal Federal de La Plata (8 y 50) a las 17hs. Para gritar una vez más ¡Que devuelvan a Johana!