*Por la poderosa asamblea del Barrio Madres a la Lucha
Hoy queremos alzar un grito que no tiene apoyo estatal, ni de ninguna fundación, porque como todos los proyectos de la asamblea, lo sostenemos a pulmón: en marzo de este año hicimos realidad nuestro sueño colectivo de inaugurar el invernadero “Manitos Verdes”. Lo concretamos a través de la autogestión, vendiendo comida y realizando ferias para recaudar fondos para los materiales. Al poco tiempo comenzaron los talleres de huerta para niños porque estamos seguros de que el camino hacia un mejor futuro es la soberanía alimentaria.
Sin embargo, el 19 de julio se publicó una noticia en el diario Tiempo Sur que decía que “mediante la colaboración de la Fundación Banco Santa Cruz se podría impulsar y lograr aun más autonomía” de la huerta y que “la Subsecretaría de Agricultura Familiar (SsAF) del Ministerio de Agroindustria también asiste”. No sabemos cuál es la fuente de esta información ni por qué no vinieron al barrio a consultarnos, pero nada está más lejos de la realidad. Incluso, la fundación mencionada rechazó el proyecto que presentamos para financiar la instalación de un baño.
Ni el municipio ni el gobierno provincial nos asistieron desde que comenzó Manitos Verdes y tampoco se han acercado.
No fue fácil construir bajo el frío intenso, las lluvias y las ráfagas de viento. Cuando comenzaron los talleres también aparecieron nuevas necesidades: más herramientas para los 35 niñas y niños que asisten, capacitaciones para formar al equipo de trabajo, ropa de abrigo, electricidad y calefacción. Situaciones que fuimos resolviendo gracias a la voluntad y las donaciones de muchos vecinos de la ciudad que colaboran de manera anónima.
Agradecemos a quienes sí aportan desde el corazón, sin querer figurar y sacar tajada de esto. El miércoles 1 de agosto hicimos entrega de la ropa de abrigo que recibimos para los chicos y chocas de los talleres para que ni el invierno nos pare. Seguiremos creciendo en este espacio lleno de vida y trabajo con un equipo de vecinas y vecinos que decidieron ponerle el hombro pensando en las nuevas generaciones. ¡Seguiremos apostando a la alimentación consciente y soberanía alimentaria!