23 noviembre, 2022
, Hábitat

¿EN QUÉ CONDICIONES VIVIMOS?

Porque el conocimiento es poder, desde el Observatorio Villero de La Poderosa junto a la Fundación Rosa Luxemburgo, nos propusimos investigar: ¿Cómo es la realidad concreta de los barrios populares del país?

Hasta ahora los datos existentes resultan insuficientes. Este faltante de información es una constante para los sectores empobrecidos de América Latina. Necesitamos generar indicadores que sirvan para establecer prioridades a la hora de pensar políticas públicas.

Para construir índices representativos de nuestros territorios, diseñamos una metodología original: el relevamiento se piensa, se desarrolla y se lleva a cabo DESDE EL BARRIO PARA EL BARRIO.

Luego de cinco meses de trabajo, Diego Mora de la Villa 21-24 de CABA y Cintia Ávila, de barrio Alberdi, de Río Cuarto, Córdoba, presentaron el Relevamiento de Hábitat 2022.

El mismo cuenta que: Con respecto al agua el 15% de las viviendas no tienen conexión a una red de agua, el 63% tiene conexiones informales, mientras que el 44% nos vemos en la obligación de comprar agua embotellada para el consumo. El 89% de las viviendas no posee red de gas natural y se utiliza garrafas para cocinar, mientras que sólo el 36% tiene conexión a cloacas (según el INDEC es el 74%). En lo que respecta a electricidad el 51% tiene tendido eléctrico fuera de las paredes y el 29% sufre pérdidas de electrodomésticos por la conexión precaria. Lo más preocupante es que un 23% convive con hacinamiento, en Barrio La Cariñosa, Rosario, es un 60%, mientras que en barrio Bosco II, Santiago del Estero, alcanza el 66%.

En el evento participaron representantes de UNICEF, Proyecto Habitar, El Gato y La Caja y Jóvenes por el Clima.

«Esto nos abre las puertas a demandar y ser ejecutores de políticas públicas para poder garantizar el Derecho en nuestros barrios, como nosotros los pensamos y no como el resto los piensan, es que los piensan…», Cintia Ávila.

Hicimos 1168 encuestas en 23 barrios de 16 provincias del país que brindaron información sobre numerosos aspectos de la vida en nuestros barrios: características de las viviendas, infraestructura de los territorios, densidad de espacios verdes y de recreación y datos ambientales, entre otros.

Tener estadísticas de la vida en los barrios populares es muy importante, porque es imposible transformar las condiciones de un territorio sin conocerlo.