17 noviembre, 2015
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Desde Oasis al mundo

Medellín, 17 de noviembre de 2015

COMUNICADO A LAS AUTORIDADES LOCALES, DEPARTAMENTALES, CLACSO, COMUNIDAD ACADÉMICA, ORGANIZACIONES SOCIALES Y MEDIOS DE COMUNICACIÓN.

Moravia, a través de los últimos 40 años ha sido constantemente un territorio de resistencia, por el deseo de la consecución de una vivienda digna para muchos pobladores de la ciudad de Medellín, con particulares condiciones económicas y sociales, como: madres cabeza de familia, desplazados, víctimas de la violencia, personas sub-empleadas. Todos, con un único deseo: autoconstruir un barrio lleno de tejido social, un anhelo que se ha visto constantemente interrumpido por hechos claros de violencia, como el asesinato de un alcalde por haber entregado los títulos del barrio a los moradores. Pues hay un plan parcial mediante el cual no se ha mejorado nada. Seguimos igual: un plan que desperdició 267.000 millones de pesos, aumentando la deuda social de la ciudad con los moradores de este sector; un proyecto que fue pensado desde lo ambiental y terminó siendo un plan ornamental, para continuar mostrando una ciudad libre de personas como nosotros, que terminamos siendo un estorbo para la administración en sus planes de ciudad.

El sector del “Oasis” del cual nosotros venimos, y en el cual nos estamos consolidando y construyendo como comunidad, fortaleciendo nuestros lazos y tejido social, viene siendo atropellado a través de mentiras como la “recuperación del espacio público”, lo cual en realidad no es otra cosa que continuar con el plan de construcción de una mega-estructura, un puente que pretende solucionar algunos problemas de movilidad en la ciudad a través del derroche de miles de millones de pesos, para lo cual necesitan desalojarnos. Y desalojarnos sin control alguno, pasando por encima de los Derechos Humanos, atropellando a las comunidades que no le servimos a la alcaldía para continuar con ese proyecto.

Es así como llegan con mentiras a nuestro territorio, como censarnos para una “ayuda de la alcaldía”, hasta que terminan usando nuestros datos para hacernos llegar una notificación de desalojo, como el pasado 9 de noviembre. Desde la fecha hasta acá, la incertidumbre ha sido una constante. Estuvimos despiertos todo el día programado para el desalojo, ese miércoles 11 de noviembre, desde las 3 de la mañana. Y debimos soportar la presión de la fuerza pública con insultos, con el cierre del comercio en el sector y con rumores de desalojo permanentes.

Además, también debimos tolerar el derrumbe de una estructura en la que trabajamos para la recuperación de nuestro territorio en el morro de Moravia, donde como ladrón en la noche llegó la administración a derribar aquello que la comunidad estaba construyendo: los juegos de nuestros niños. Pues a ellos atropellaron, a ellos los bajaron de los juegos para poderlos destruir.

Señores y señoras de las instituciones competentes en el tema que hoy nos afecta, por el inminente desalojo de nuestras viviendas, no detengan este desalojo solo por nuestras acciones legales o por los eventos que se realizan en nuestra ciudad: deténganlos DEFINITIVAMENTE, porque en sus manos están nuestras viviendas y, con ellas, nuestras vidas.

A nuestros deseos de vivienda digna, ustedes pueden satisfacerlos y nosotros hemos tenido la voluntad de sentarnos a dialogar para mejorar nuestras condiciones de vida. Pues no es solo un acto de voluntad, es un deber que ustedes como Estado tienen, y un derecho que aún se nos debe. No lo hagan, no nos desalojen: no lo merecemos, ni nosotros ni nuestros vecinos, ni nuestros hijos.

Jóvenes, profesores, profesoras, estudiantes, académicos, y organizaciones sociales, todos ustedes y en especial CLACSO, Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales, como la gran institución que es, a la cual le hemos abierto las puertas de nuestro territorio desde el centro de desarrollo cultural de Moravia, comprométanse hoy con nosotros a detener este desalojo. No solo por hoy, sino para siempre, porque las comunidades como nosotros en el mundo entero no merecemos lo que Estados y administraciones como la de Aníbal Gaviria están haciendo con sus políticas de desalojo y desmejoramiento de nuestras condiciones de vida. Hoy, solidariamente como lo hemos hecho nosotros con ustedes, tal como hemos respetado cada profesor y cada estudiante que se acercó para una investigación o una entrevista, necesitamos que esa solidaridad venga de su parte, solidaridad para levantar la voz y para exigir que desalojos como los sufridos por la comunidad de Villa Café, con operativos militares de más de 600 oficiales, ya no continúen. No, no lo queremos para nosotros, ni para ninguna de las comunidades que a ustedes lo rodean.

Por aquí, nuevamente llegan notificaciones de desalojo, después de haber recibido la visita de CLACSO, hoy, sí, hoy, martes 17, nos pegan notificaciones en las puertas de nuestras viviendas, al mejor estilo de las dictaduras del cono sur en América, para así “comunicarnos” el operativo de desalojo que se realizará al otro día, mañana, sí, mañana, miércoles 18 de Noviembre, a las 6 AM, estando impresa desde el jueves 12 de Noviembre la orden de desalojo. Pues así, la alcaldía de Aníbal Gaviria deja entrever que se ocupa de esconder a toda luz las problemáticas de la ciudad.

Nuevamente nuestra comunidad estará en un estado de zozobra permanente, de angustia y represión. No dormiremos tranquilos en nuestras viviendas, pensando en el día de mañana, cuando no tendremos un techo donde refugiarnos, donde dormir con nuestras familias, ni con nuestros hijos, sí, nuestros hijos, que son lo más importante. Aquí, este Estado les está violando sus derechos fundamentales a una vivienda digna y nosotras, madres cabezas de familia, tendremos que refugiarnos con ellos. No sabemos dónde.

EXIGIMOS SOLUCIONES DE VIVIENDA DIGNA. Y le solicitamos a la comunidad internacional y nacional que no nos quedemos callados ante los abusos. Hay que denunciarlos, porque NO queremos ser nuevamente desplazados. Ya el conflicto interno colombiano nos desplazó y ahora el Estado colombiano nos pretende desplazar nuevamente.

Por favor,
detengan lo que está sucediendo:
¡NO MÁS DESALOJOS EN LA CIUDAD!

Con amor y con el deseo de unirnos todos y todas, en esta lucha por la vivienda digna en América latina, para una América Latina mejor, una América Latina más justa y menos desigual. Muchísimas gracias, por su atención y su apoyo.

HABITANTES DEL SECTOR DE OASIS, EN MORAVIA.

AsentamientosPopularesMedellín@gmail.com
+57 3195567258
+57 3004566908

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