Desde la comunidad Wichi de Formosa nos subimos a esta moto que recorre el país en el último rinconcito de la Argentina, donde hace seis mandatos tenemos el mismo gobernador: Gildo Insfrán. Quienes pertenecemos a pueblos originarios aun no contamos con viviendas dignas, ni somos tenidos en cuenta cuando vamos a los hospitales supuestamente públicos. La imagen es muy elocuente y común: en los alrededores del Hospital de la Madre y el Niño, una mañana soleada de repente se llena de nubarrones y alzamos nuestras colchas y ponchos, ante los murmullos de la gente y la indiferencia de las autoridades. Pero nuestra asamblea avanza con fuerza, y mientras seguimos luchando para que los más jóvenes puedan terminar sus estudios, ya estamos planificando los primeros talleres de educación popular.
1 marzo, 2016
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Ya lo dijo Carlitos…
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