Fotos: gentileza Radio La Bulla
En la noche de este miércoles 23 de mayo, la policía de San Luis una vez más actuó sin límites, entrando violentamente a un domicilio de una familia en el Barrio Mugica. Allí desplegaron una represión atroz tirando balas de goma y gas pimienta, rompiendo los vidrios de la vivienda e hiriendo a toda la familia, el padre, la madre y sus 7 hijos, algunos de ellos menores de edad y con problemas de salud.
Se llevaron detenidos a 3 integrantes de la familia, que fueron liberados a las 18 del jueves 24 de mayo, después de pasar toda la noche y la tarde en las celdas de la Comisaría 41 sin haber recibido atención médica.
Los integrantes de esta familia vienen siendo perseguidos y violentados física y emocionalmente desde agosto del año pasado, de manera reiterada por la Policía de San Luis, y los uniformados de la 41 con total impunidad. Se hizo presente una abogada y la policía le negó la posibilidad de ingresar a ver a quienes están detenidos. La respuesta de la causa de detención es: Resistencia a la Autoridad y Disturbios en la vía pública.
“A mí me pegaron un tiro en la pierna y ahora no puedo moverla” contó la mamá, explicándonos que tiene un hijo de 10 años que sufre del corazón y al que le quisieron pegar tratándolo de “guacho”.
También les destrozaron los vidrios de la casa, las mesas y las sillas. Luego de tirar el gas pimienta, torturaron al hijo mayor hasta desfigurar su rostro y al padre lo picanearon y ahora no se pueden mover de los dolores en el cuerpo, sobre todo de las piernas.
Durante el jueves 24 el Juzgado Correccional N° 2 rechazó el habeas corpus presentado para proteger la integridad de los compañeros.
Familiares, amigos y organizaciones sociales resistieron todo el día, exigiendo la libertad inmediata de los compañeros detenidos y el cese a las persecuciones que viene sufriendo esta familia, y los barrios populares de San Luis.