Dicen que el cielo no se puede tapar con las manos, y los basurales, que cada vez son más, tampoco.
En el barrio San Juan Bautista, Formosa, ya hay tres focos de basura en la zona de la barrera y barrios aledaños y son una invitación para los mosquitos, moscas y demás insectos. El camión recolector directamente no pasa por la barrera y hace tres meses que el sector no es fumigado. Además, debemos trasladar los residuos seis cuadras hasta el punto de arrojo.
En los barrios Río Paraná y Mendoza, en Corrientes, el camión no pasa por el barrio debido a las malas condiciones de las calles y en cada esquina hay un micro basural que genera contaminación. Es un foco de infección para vecinas y vecinos.
Por su parte, en Chacra 136, de la ciudad de Resistencia, Chaco, la recolección de basura brilla por su ausencia al igual que en los barrios Betina Vázquez, San Expedito, Las Palmeritas y dos sectores del 29 de Agosto. Hay pequeños basurales en las esquinas y se generó uno más importante al fondo de la chacra.
El saneamiento es fundamental para generar un ambiente sano para todas y todos.
Nos cansamos de presentar reclamos a los municipios, pero no nos dieron una respuesta.
Nos seguimos contaminando y enfermando, y los gobiernos nos siguen ignorando.
