Hace tres meses que la provincia Chubut se encuentra sumida en este conflicto. Los trabajadores y trabajadoras del Estado no están cobrando sus sueldos en tiempo y forma, no tienen paritarias, sufren el pago escalonado de sus haberes y jubilaciones y el incumplimiento de la cláusula gatillo del acuerdo paritario. Ante la falta de respuestas del gobernador Mariano Arcioni, las y los docentes mantienen las medidas de fuerza con paros activos y movilizaciones. Luego de 12 semanas sin clases, las y los estudiantes de la provincia decidieron apoyar la causa docente con tomas pacíficas en toda la provincia, sumando su reclamo por el derecho a una educación de calidad. Entre sus reclamos también se encuentran el pedido de el pleno funcionamiento de la obra social SEROS y del TEG (Transporte Estudiantil Gratuito), así como el plan de infraestructura escolar.
En Esquel, una localidad donde se respira lucha, las y los estudiantes crearon la Asamblea Permanente de Estudiantes Autoconvocados (APEA) y se organizaron para llevar adelante la ocupación pacífica del edificio de Supervisión de Educación. La ocupación pacífica lleva 40 días y aún no hay respuestas por parte del Ministerio de Educación. “Comenzamos a formar parte de las asambleas principalmente por el TEG que estuvo tres meses cortado, y eso obviamente generó deserciones porque hay pibes y pibas que viven a las afueras de la localidad. De la necesidad de ser escuchados surgió el planteo de que había que tomar medidas más fuertes, mocionamos por ocupar el edificio y entramos”, cuenta Marco Antonio Nahuelanca, uno de los estudiantes que forma parte de la toma.
“Otro tema es el hecho de las condiciones edilicias de las instituciones. Los Institutos de Formación Docente y Formación Técnica acá en Esquel y en la Comarca no cuentan con edificio propio y los edificios en las cuales funcionan estos, que contienen a su vez escuelas primarias y secundarias, están muy deterioradas. Hay algunas que realmente parecen un basurero por dentro; tienen problemas en las conexiones eléctricas, filtraciones en el techo y las paredes, roturas de vidrios, las cloacas se rebalsan, pérdidas de gas”, explica Daniela Vicenti, otra estudiante que acompaña la medida.
La Asamblea Permanente de Estudiantes Autoconvocados alza la voz para que los ministros y los supervisores de educación escuchen sus reclamos. Nuestro grito poderoso acompaña la resistencia de las y los estudiantes que entienden que el único camino es la defensa por la educación pública.